Ciprés

(Cupressus Sempervirens)

El ciprés, tiene como regentes a los planetas Saturno, Plutón y Urano, los Maestros del Cambio.

Es un guardián eterno entre mundos, un símbolo de transición y renacimiento. Desde la antigüedad, su presencia se ha asociado con la protección y la guía en los momentos de cambio, ya que conecta lo físico con lo espiritual, lo tangible con lo intangible. Este aceite esencial trabaja en sintonía con el elemento tierra y el chakra raíz, brindando estabilidad, solidez y un profundo sentido de pertenencia cuando las circunstancias de la vida nos llevan a cruzar umbrales desconocidos.

El Ciprés es un Guardian, gran protector, que establece límites claros, ayudándote a discernir qué energías te pertenecen y cuáles no. En duelos, mudanzas, rupturas o cualquier tipo de transición, el ciprés actúa como un ancla que estabiliza tus emociones y te ayuda a mantenerte firme mientras navegas por las aguas del cambio. Su aroma profundo, masculino y almendrado, despierta la fuerza interior y te conecta con la sabiduría ancestral que reside en lo más profundo de tu ser.

El ciprés no solo calma y protege, sino que también es un facilitador del fluir natural de la vida. Es ideal para momentos de tensión emocional o física, ya que su acción antiespasmódica y su energía estabilizadora te envuelven en una sensación de seguridad y calma. Te invita a soltar lo viejo, a aceptar el cambio como parte del ciclo eterno, y a avanzar con confianza hacia lo nuevo que la vida tiene reservado para ti.